Un invierno muy dulce

Recetas
NOV242017
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Un invierno muy dulce

Con la llegada del frío los escaparates de las pastelerías se empiezan a llenar de los dulces típicos de invierno. En noviembre se inaugura la temporada de buñuelos, huesos de santo, tocino de cielo, panellets… Pero, ¿por qué no renovar los viejos clásicos?

Las últimas tendencias en pastelería indican que los clientes actuales buscan un toque diferente en los postres de toda la vida. Por ejemplo, desde hace unos años los buñuelos de viento y su infinidad de variedades se han convertido en los best sellers de la repostería.

A los tradicionales rellenos de nata, crema y chocolate se han sumado otros mucho más innovadores como son los buñuelos de mojito, baileys, limón, turrón, plátano, maracuyá, lacasitos, limoncello, castaña, frambuesa o chocolate blanco. Incluso algunas pastelerías se han atrevido a probar con algunos menos dulces y con sabor a humo, tierra mojada y boletus.

Con los huesos de santo pasa exactamente lo mismo. A la receta tradicional basada en la elaboración de una exquisita masa de mazapán y almíbar, se han incorporado nuevos colores y rellenos que le dan un aire mucho más actual. La nueva fusión ha dado como resultado huesos de santo de chocolate rellenos de chocolate, de fresa rellenos de frambuesa o de limón rellenos de crema. Una colorida selección que destacará, sin duda, en tu escaparate y hará las delicias de tus clientes.

Como también lo harán las últimas propuestas en panellets. Y es que este dulce típicamente catalán se ha afincado en las pastelerías como una más de las grandes apuestas dulces de estas fechas. A los tradicionales panellets de piñones, almendras, coco y chocolate se han sumado otros sabores como fruta de la pasión, mojito, cereza, plátano, yogur y albaricoque, especias y manzana, frutos rojos o pistachos con pera. Incluso también es posible encontrar panellets de membrillo, moscatel y pasas, de cacao con perlas de chocolate, de rosa o de castañas de mazapán con chocolate.

Sin embargo, la gran novedad en los escaparates de las pastelerías de estas fechas es la invasión de dulces típicamente de Halloween. Ahora los buñuelos, huesos de santo y panellets tienen que convivir con las tartas, galletas, cupcakes o pastelillos con forma de calabaza, murciélago, castillos encantados, tumbas o incluso de telarañas de chocolate.

Y es que esta nueva pastelería creativa ha desbancado en los últimos años a los postres tradicionales de estas fechas, en las que la nueva joya de la corona son los cakepops, unas bolitas de bizcocho con formas de fantasmas o calaveras que hacen las delicias de los más jóvenes.

Aún así, pese a la innovación pastelera, hay un elemento fundamental que no ha variado, y ese es la calidad y la excelencia en la elaboración del producto. Los nuevos clientes que se acercan a este tipo de pastelería creativa van buscando justamente esa unión entre la innovación y la máxima calidad. Por ello, la gran apuesta de las pastelerías en estas fechas pasa por la combinación del sabor y el buen hacer tradicional, para que este invierno sea menos frío y más dulce.

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